20 agosto, 2021

El Servicio Andaluz de Salud ha notificado un incremento del 36% de las citas durante el primer semestre del año 2021 respecto al año 2019. En números totales, los centros de Atención Primaria del Servicio Andaluz de Salud (SAS) han atendido 47.014.086 de citas durante el primer semestre de 2021. Durante el año 2020, los datos oficiales ofrecidos cuantifican en más de 40,4 millones de asistencias en la historia digital a pacientes desde los centros de salud . Se calcula con estos datos que se ha ofrecido atención sanitaria al 97,20% de los más de 8,4 millones de población con los que cuenta Andalucía. Si comparamos con la actividad de los centros dependientes del hospital, tanto urgencias como consultas externas, en el año 2020 se atendieron algo más de 7,5 millones de consultas y en el primer semestre de 2021 se registraron un total algo superior a 3,7 millones.

Tanto SAMFyC como semFYC han ofrecido datos específicos sobre las tareas de los médicos de familia desde el inicio de la pandemia, con resultados que muestran una atención continua y centrada en la resolución de problemas y no en trámites administrativos. Estos datos contradicen la falsa y extendida noticia sobre “centros de salud cerrados” y ofrecen una idea del extenuante trabajo desarrollado en el último año y medio, agotador para el facultativo, aunque insuficiente para la población. Concretamente en Andalucía están suponiendo en la mayoría de casos que el médico/a de familia tenga que atender una agenda con el doble de citas que las estimadas aconsejables desde el mismo SAS (https://www.juntadeandalucia.es/presidencia/portavoz/salud/141724/ConsejeriadeSaludyFamilias/JesusAguirre/AtencionPrimaria/pacientes/citaprevia), pese a lo cual hay demora en la atención, penalizada por los objetivos del Contrato Programa.

La población andaluza demanda urgentemente un mayor número de médicos de familia, algo que desde SAMFyC/semFYC venimos reclamando con insistencia desde hace varios años en la campaña 1 médico de familia más por cada 10.000 habitantes (#1MFmás). Sin este requisito fundamental, que implica mejores condiciones laborales y económicas, difícilmente se podrá mantener la calidad de la atención sanitaria a la población.

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